Los peores finales de series icónicas

Todos hemos invertido tiempo en ver nuestras series favoritas, y cuando llega el gran final se espera que sea algo sublime o que al menos mantenga el nivel. Pero no todas lo logran, es por ello que te presentamos los peores desenlaces de programas de televisión (Ojo, ¡tiene spoilers!)

House of Cards. Fue uno de los grandes éxitos que tuvo la plataforma de streaming, Netflix. Sin embargo, luego del despido de su protagonista, Kevin Spacey, tras ser acusado de abuso sexual por parte otro actor trataron de salvarla con mayor protagonismo a Claire Underwood. Pero lo que parecía una gran idea, no logró ser plasmada en la serie, recibiendo malos reviews de los seguidores.

Two and a Half Men. La salida de Charlie Sheen del programa fue un golpe duro para todos, y su reemplazo -Ashton Kutcher- un multimillonario que llega de la nada para comprar la casa de Charlie, no tuvo mucho sentido. Eso sin contar que Angus T. Jones (Jake) se fue de la serie.

No obstante, su final fue lo que dejó a todos sorprendidos cuando revelaron que en realidad Charlie no había muerto, sino que Rose, su acosadora de toda la vida, lo tenía prisionero. Y cuando escapa muere de verdad cuando le cae un piano en la cabeza, un guiño hacia Sheen por parte de Chuck Lorre, director de la serie.

Game of Thrones. Luego de ocho temporadas marcando récords y sumando más seguidores, era momento de decirle adiós a la serie. Pero para hacer un cierre rápido y sin contar con la ayuda de George RR Martin, los creadores decidieron resolverla por su cuenta…

Compuesta de solo 6 capítulos para cerrar una historia épica, los personajes dieron cambios drásticos y las historias se adelantaron tanto que se veía lo que sucedería más adelante. Uno de los cambios más criticados fue el de Daenerys, quien se convertiría en la Reina Loca de forma abrupta, lo que indicaba que no tendría un final feliz.

Dexter. El asesino serial más querido por la audiencia tuvo un final defraudante, en comparación con las anteriores temporadas que nos cautivaron. El desenlace fue apresurado, y terminó con un Dexter viviendo su propio infierno personal en la clandestinidad como un leñador.